lunes, 10 de marzo de 2014

Puebla se pinta Rojiblanco



Un viaje que voy a recordar mucho fue el que hicimos a la ciudad de Puebla, para el cual con anterioridad hicimos un trapo con la leyenda del máximo exponente del Guadalajara el máximo goleador del rebaño, el señor Salvador Reyes, con la frase tan famosa que dijo ante la mercadotecnia que implanto Jorge Verga de "Chivas de Corazón" "Chava" contesto de la manera mas adecuada que pudo y dijo: "Yo no soy Chiva de Corazón, soy Chiva de Nacimiento".

Con este trapo partimos hacia Puebla, rentamos una camioneta en la cual íbamos 13 personas, 13 hermanos de aliento, 13 locos por el Guadalajara, para alentar al Guadalajara, el partido se llevaría a cabo un domingo a las 5 de la tarde, pero nosotros partimos un sábado en la tarde, pues teníamos un amigo de la "Legión", una barra del Guadalajara, el cual nos invito para hacer la previa del partido, consumir un poco de cerveza, platicar e intercambiar experiencias una noche antes del partido, asi que nos fuimos cargados de hieleras con cerveza y comida, pues el camino iba a ser mas lago de lo normal, habíamos designado a un amigo para que manejara y no consumiera nada de alcohol, el viaje de ida no fue pesado, todos platicando, bromeando y conviviendo, se hicieron presentes los cantos de apoyo al equipo, hasta que por fin llegamos a la ciudad de Puebla aproximadamente a las 12 de la noche y decidimos parar para cenar unos tacos antes de llegar a la casa de nuestro anfitrión.

Después de cenar el panorama no fue alentador, pues no sabíamos como llegar a la casa de la persona que nos invito a la fiesta, y fue tal la desesperación que dimos una vuelta prohibida en una calle y nos costo una multa un poco elevada, desesperados y con la economía mermada, decidimos mejor llegar al hotel de concentración del equipo, pues algunos integrantes, del grupo al cual pertenezco, tienen relaciones con algunos de los jugadores, esto para que nos dieran asilo o por lo menos un apoyo, no pudimos entablar conversación con ningún elemento del equipo o del cuerpo técnico, pues la seguridad del lugar nos nos dejo, y decidimos llegar a un hotel a descansar esa noche, pues la camioneta era muy pequeña para dormir cómodamente.

Al día siguiente bajamos a desayunar y después a conocer un poco de Puebla, fuimos al centro conocimos un poco de arquitectura, sus parques y calles, una ciudad agradable, clásica provincia de la república mexicana.  Hasta que llego la hora de partir al estadio. Cuando llegamos ya estaba ahí un contingente de la barra de la "Legión 1908" que entonaba cantos a las afueras del estadio, ahí nos integramos a ese gran grupo y con bombas de humo y aventando rollos de sumadora entramos al estadio

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